martes, marzo 14, 2006

Marcha por la Paz

Cuando escuché al Padre Gerardo, párroco de La Legua, creí que se refería a una época de nuestra historia de hace más de 20 años, donde en medio de protestas, violencia callejera y balaceras, el gobierno militar intentaba imponer su estilo de conducción del país. Más ¡Oh sorpresa!, el Padre Gerardo se estaba refiriendo a lo que no sólo es la realidad de su población, sino la vivencia de lo que sucede en varias poblaciones de la ciudad de Santiago a causa del narcotráfico y la violencia asociada a ese mal.
"La gente esta aterrorizada y muchos quieren irse de allí, a pesar de que es el lugar que aman pues en éste han vivido todo una vida"...

¿Que hacer entonces?¿ Deberemos abandonar estos barrios y dejar nuestra historia en manos de la delincuencia y los narcos?...

"¡No nos dejaremos amedrentar!"

Las Marchas por la Paz, han sido la respuesta concreta, y el sábado recién pasado, primero fueron 40 personas de la Parroquia, encabezadas por el Padre Gerardo y el grupo de canto "Tierra sagrada", que salieron a la calle con camisas blancas y pañuelos, para en medio de los puntos más conflictivos cantar, orar y llamar a deponer las armas a quienes en ese momento se batían a fuego cruzado. Junto a la oración de la comunidad que a esa altura ya sumaban más de 400 participantes, la balacera se detuvo y la comunidad pudo concluir su macha con una oración de más de una hora al interior de la parroquia.

Quienes escuchamos ese relato y veíamos la entereza del párroco de La Legua nos quedamnos mudos y a varios se nos vinieron las imágenes de Ghandi, Martir Luther King, y otros grandes inspiradores de la "No violencia activa".

Por mi parte recordé a mi amigo Manuel que como he relatado en este blog, el contexto de violencia en el que vivía, fue sin duda lo que gatillo ese gérmen de violencia que se había incubado en el desde su infancia, más que con su determinación y coraje había logrado aquietar durante sus ultimos 6 años de libertad.

¿Y nosotros como nos sumamos a ese movimiento de Paz? ¿Como ayudaremos a que en otros Manueles no se despierte ese gen irracional?